No tienes un pelo de tonta, ni arriba ni abajo
Modo cine
Este ejecutivo se ha ido a París con su exuberante secretaria, una diosa de ébano de las que sabe cómo tener contento al jefe. Solo hay que ver cómo es capaz de actuar cuando se le pide un esfuerzo, lo da todo y más si hiciera falta. Menuda pedazo de mujer.