Masajista profesional sabe cómo contentar a un cliente exigente
Modo cine
Nada más hay que verla andar y la determinación con la que se dirige a hacer su trabajo. El cliente va a quedar satisfecho sí o sí y para ello no dudará en restregar las tetas por la espalda, dejarse correr en la cara o chupar hasta que le dé en la campanilla.